El expresidente de la Generalitat Valenciana Francisco Camps se mostró «emocionado» este miércoles tras conocerse su absolución en el caso Gürtel tras «quince años muy dolorosos» del calvario judicial que quedó saldado con diez causas archivadas. Un tiempo en el que no podía «estar en primera línea como yo quería». «La cuestión siempre ha sido política y no jurídica», defendió.
Camps señaló que su ilusión por la política «es la de siempre» y que tiene «ganas de volver», aunque su futuro en este ámbito «depende de los presidentes del PP». «Hablando con el PP», recordó, al tiempo en el que desveló que el líder nacional del partido, Alberto Núñez Feijóo, le dio los ánimos por teléfono en una llamada «cordial».
«Tengo todo el tiempo y la fuerza del mundo para todos los tiempos», aseguró. «Mi voluntad es incontenible. Soy un político español al servicio de los españoles y del PP», por lo que asume la dirección de la formación y mantiene su «lealtad». De hecho, descubrió que tuvo jugo con Carlos Mazón antes y comprometió sin comprometer la formación de «filiación por 41 años». «Me gustaría volver alguna vez a las urnas», repitió.
El exdirigente popular, que siempre ha defendido su inocencia, se enfrentó en rueda de prensa al despacho de su abogado, Pablo Delgado, una hora después de conocer su absolución en el decreto y el último juicio judicial que celebró ante el estancamiento del ‘caso de los trajes’, que acabó con su carrera política y provocó su dimisión como presidente de la Generalitat, ganó dos elecciones absolutas de alcalde de cara a la candidatura del Partido Popular de la Comunidad Valenciana. En 2011 registró más de 1,2 millones de votos.
«Me dimití para defender la institución de la Generalitat Valenciana ante los tribunales y la dignidad de mi partido, que hoy sale fuerte», aseguró. «Soy consciente, como lo soy desde hace dos años, de que no me pasa nada», afirmó, lamentando que hayan pasado tres años desde la primera acusación. Camps afirma que «esto no le puede pasar a ningún español». No tengo la sensación de que me hayan separado de la política y de que mi nombre haya quedado fuera».
«Nada debería nada, ya nadie debería nada», señaló, al tiempo que expresó: «He venido aquí por la conciencia de no tener nada malo y para que todo el bien sea recibido». El expresidente de la Generalitat relató sus «quince años de sufrimiento» y el «tormento personal» que superó. En este sentido, dejó constancia de que más de 300 personas vinculadas al PP valenciano han visto sus causas judiciales desestimadas y hizo una mención especial a la exalcaldesa de Valencia, la fallecida Rita Barberá: «La llevo siempre en el corazón».
La lucha «fue feroz pero estaba convencido de que las jugadas me darían la razón y validarían mi honor». «No me escondo de mí mismo, no busco las cosas», subrayó. «La verdadera reparación para mi persona es la que dictó mis juegos de hoy». Se trata de una “reparación permanente importante”, insistió.
La Audiencia Nacional la acusó del delito de tráfico de influencias paralelo al delito de prevaricación que se le imputaba en el caso Gürtel, en relación con los contratos adjudicados a la empresa Orange Market para el stand de la Comunidad Valenciana en Fitur en 2009. La Fiscalía Anticorrupción le reclamó un año de prisión.
Más de cien años de publicaciones periódicas recibieron la atención de la convocatoria de Camps, que atendió a los medios de comunicación ante una pantalla en la que se mostraban vídeos de su etapa en la política autonómica y una imagen de la Senyera junto al lema ‘Gracias por confiar’.
El resultado es que la resolución judicial conocida este miércoles es el «fin del caso Camps», que «nunca debí haber tomado». «La sentencia es ejemplar y válida y denigra la acusación», según Delgado, quien lamentó la «persecución que sufrió» por él representada. En este sentido, ha sostenido que el «acoso» de Camps «es el único a nivel nacional e internacional». El expresidente autonómico agradeció el «esfuerzo» a su abogado.
En una sentencia de 232 hojas, la Sala de lo Penal condena a los empresarios Francisco Correa, Pablo Crespo y Álvaro Pérez ‘El Bigotes’ por haberse conformado. En Camps, los ex concejales y funcionarios de la Generalitat valenciana fueron incluidos en una serie de contratos de menor cuantía entre 2004 y 2009, entre ellos la celebración del Tenis Open y la Volvo Ocean Race.
Sobre otras cuestiones de política nacional, Francisco Camps indicó que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, «deberá dar explicaciones, si su mujer los investiga, como han hecho desde el primer día». «Sánchez no está a la altura de los españoles. Un presidente del Gobierno no puede esconderse», añadió.